El conjunto de
escuelas y movimientos que han ido conformando la historia de las corrientes
artísticas, constituye la base indiscutible de las características que se dan
en el área de la literatura, como expresión del arte. Estas corrientes o
movimientos literarios surgen y permanecen en el tiempo, de acuerdo con los
acontecimientos históricos circundantes y los estudios filosóficos del momento.
A continuación, unas letras para tipificar las etapas más significativas de
estas tendencias.
ANTIGÜEDAD CLÁSICA (CLASICISMO)
La Antigüedad clásica es un
término amplio que abarca un largo período en las áreas dominadas por Grecia y Roma; es decir, se identifica con el periodo greco-romano de la Edad Antigua en el mundo grecorromano la Cuenca del Mediterráneo y el Próximo Oriente. En otras palabras, la Antigüedad clásica se localiza en el momento de
plenitud de las civilizaciones griega y romana (siglo V a. C. al siglo II d.C) o en sentido amplio, en toda su duración (siglo VIII a. C. al siglo V d.C.). El término se opone a la antiguedad tardía y remite a la herencia de la civilización grecorromana; es, sobre
todo, empleado por la historiografía anglosajona para describir la Antigüedad.
Entre
sus objetivos, buscó la belleza y la perfección. Las obras se desarrollaban
bajo los principios de claridad, sencillez y proporción. Además, se manejó un
equilibrio entre la forma (palabra) y el fondo (idea). Grecia y Roma son los exponentes del Clasicismo.
Algunos representantes fueron: en Grecia, Homero con sus obras épicas La Ilíada y La Odisea; Sófocles con su texto teatral Edipo Rey; Aristófanes con su teatro Las Nubes. En Roma, están Virgilio con su obra épica La Eneida y sus poesías Las Bucólicas o Eglogas. Los poetas líricos Horacio y su "Arte poética",
junto a Ovidio y "El arte de amar", también son autores
significativos de la antigüedad clásica.
En este sentido, se considera que
este periodo se inicia con la Iliada, el poema griego de Homero (siglo
VIII-VII a.C), el más antiguo encontrado intacto hasta nuestros días. Este
periodo engloba el auge del cristianimso y el declive del Imperio Romano y termina con la disolución de la cultura clásica y el principio del
periodo denominado Antiguedad tardía (300-600 d. C.) y de la Alta Edad Media (500-1000 d.C).
La dimensión espacial coincide con la cuenca del Mediterráneo, extendida
hacia el Oriente Próximo con el Imperio de Alejandro Magno y el Helenismo, y hacia Europa Occidental con el Imperio romano. El empleo de este término es una referencia para la Europa de los siglos XVIII y XIX,
fuertemente influenciada por el clasicismo, además
del neoclasicismo en su cultura, se reinventa una
continuación de ese pasado por medio de una prolongación indirecta. La laxitud
en torno a las ideas transmitidas por el Occidente cristiano es, pues,
evidente.
El término clásico significa digno de imitación, y se deriva
de la admiración por el arte, la literatura y la cultura en general de Grecia y
Roma que se redescubre en el Renacimiento tras una Edad Media cuyos valores se habían desprestigiado.
Lo mismo ocurrió con el Neoclasicismo, movimiento intelectual y artístico que sigue al descubrimiento de las
ruinas de Pompeya a mediados del siglo XVIII.
Tal muestra amplia de historia y territorio cubre muchos periodos y
culturas dispares; por ello, la "antigüedad
clásica" se refiere más que nada a una visión idealizada posterior sobre
lo que era esa época. La civilización de los antiguos griegos ha sido
inmensamente influyente en la lengua, política, sistema educativo, filosofía,
ciencia, arte y arquitectura en el mundo moderno, volviendo durante el Renacimiento en la Europa occidental y resurgiendo nuevamente durante varios
movimientos neoclásicos en los siglo XVIII y XIX.
EPOCA MEDIEVAL
La
Edad Media se enmarca desde la caída del Imperio Romano de Occidente (año 476
d.C) hasta la toma de Constantinopla (año 1453). En ese período, aparecen los relatos
de héroes y existe un propósito didáctico religioso como características de
esas narraciones. En esta época surgieron los Cantares de Gesta, con los juglares y los trovadores, que tuvieron
gran influencia en Europa. Entre los Cantares de Gesta, se pueden mencionar: El Mío Cid, en España, La Canción de Roldán
en Francia y el Cantar de los nibelungos
en Alemania. Es importante tener en cuenta, en ese largo período medieval, el poema
alegórico La Divina Comedia de Dante
Alighieri.
RENACIMIENTO
Este
movimiento se da en el siglo XV y Europa asume el retorno a los ideales de la
antigüedad clásica, alentada por la enorme influencia de los humanistas. El Renacimiento consistió en un movimiento
cultural que abarca desde la liquidación del gótico hasta el surgimiento del
barroco; fue una revolución cultural con factores económicos, culturales y
científicos. Además, constituyó el
retorno del arte grecolatino o del arte clásico. Durante esta época se maneja
una concepción antropocéntrica, centrada en el hombre, y se deja de lado el
teocentrismo medieval. Autor significativo es el dramaturgo William Shakespeare,
en Inglaterra, con sus obras: Hamlet,
Romeo y Julieta, El Mercader de Venecia, entre
otras.
EL BARROCO
El Barroco fue un período
de la cultura europea caracterizado por la conflictividad que repercute en el
contenido y la forma. Este movimiento se manifestó en todo el arte (música,
pintura, arquitectura). El Barroco nace como contraposición del
renacimiento y fue originado por evolución en las artes, también contribuyeron
a su formación ideas filosóficas, políticas, religiosas y sociales. En el
barroco se observa cierto retorno a la espiritual medieval, lo cual fue
impuesto por un movimiento dentro de la religión dirigido por los Jesuitas, por
esta razón muchas personas denominan al barroco estilo Jesuita. En la
literatura se buscó la exaltación de los sentidos a través de la forma o del
fondo, utilizando imágenes brillantes (metáforas, símiles) o conceptos
rebuscados. El período
artístico transcurrió entre los años 1600 y 1750, después de la decadencia del
Renacimiento; pero su momento de mayor madurez se dio en Italia cerca del año
1630, el cual se desarrollo durante los cuarenta años siguientes. Después de
esto, el barroco se difundió por el resto de Europa resaltando en España y en
algunas ciudades Hispanoamericanas. A fines del siglo XVIII ya la palabra
Barroco paso a formar parte del vocabulario de los críticos de arte definiendo
así el estilo artístico. Como se puede apreciar, permaneció vigente durante los
siglos XVII-XVIII. Se conoce en España, al escritor Luis
de Góngora con sus "Soledades" y en Inglaterra a John Milton con su
obra El Paraíso perdido.
En el estilo Barroco se logra apreciar
la tendencia hacia lo decorativo, lo cual lleva a un abandono de ciertas reglas
clásicas de la estética y se da la búsqueda de lo original, el predominio de lo
fantástico sobre la realidad, la exploración cuidadosa de la psicología humana
y un gusto enorme por el exceso de artificios decorativos. En cuanto a los
conflictos religiosos el barroco jugó un papel muy importante, ya que la
iglesia protestante trata de construir edificaciones para su culto siendo muy
sobrios y con muy poca decoración, pero a su vez la iglesia católica trata de
representar en sus edificaciones el barroco mediante la grandiosidad y la
complejidad.
Las características más resaltantes del
arte barroco son:
§ La
existencia de libertad, lo cual va en contra de diversas normas renacentistas.
§ En
contraposición al estilo clásico se encuentra la desordenada y fuerte
vitalidad.
§ En el
barroco predomina la línea curva a diferencia del estilo clásico donde
predominaba la recta.
§ La
dinámica es muy característica de este período a diferencia de la estática
vista en el estilo clásico.
§ Los
espacios son muy grandes en la mayoría de las construcciones.
§ Existe
una exagerada decoración y con temas muy variados.
EL NEOCLASICISMO
Corresponde
esta corriente al siglo XVIII, conocido con el nombre de Siglo de las luces,
Siglo de la razón e Iluminismo. El Neoclasicismo consiste en el retorno radical
hacia los clásicos, contrario al desorden barroco. En este periodo, las obras se
basan en la razón, la moral y la didáctica. Se desecha lo fantasioso y lo
popular, y se propone lo racional, lo académico. El poder de la razón y lo
razonable; una ilimitada confianza en la fuerza de lo natural es lo que guía a
este siglo: es la época de la Ilustración. En España, se conoce a Leandro Fernández de
Moratín con su obra El Sí de las niñas
y Tomás Iriarte con sus Fábulas literarias; en Francia, el dramaturgo Jean - Baptiste Poquelin
(Moliere) con El Avaro.
Entre las características del
Neoclasicismo, se pueden mencionar las siguientes:
o
Papel de la razón en el acto creador.
Los neoclásicos consideran importante el sujetarse a los dictados de la razón
en el acto creador. Es una manera de evitar el desbordamiento de la imaginación
y de las emociones para evitar que se destruya la armonía del poema.
o
El plan de la obra. La armoniosa
distribución de las partes se logra elaborando un plan y siguiéndolo
disciplinadamente.
o
La decantación del lenguaje. Los
neoclásicos buscan lo acabado, lo perfecto, y para ello utilizan un lenguaje
poético, claro y sencillo.
o
El estudio de los modelos clásicos. La
manera como los neoclásicos logran escribir en una forma reflexiva es a través
de la lectura de los grandes clásicos de la antigüedad. Estudiando sus obras se
purifica el gusto y se aprende a conservar el dominio sobre la imaginación, aun
en medio de los estallidos emocionales. La lectura de los clásicos depara la
posibilidad de ganar una lengua culta, rica y propia.
o
El arte como imitación de la naturaleza.
Así como los griegos y los romanos concebían el arte como una imitación fiel de
la naturaleza, los neoclásicos heredan esta posición y se plantean como ideal
estético la representación fidedigna del hombre y de la naturaleza, tal y como
aparece en la realidad. Cuando por excepción incurren en hipérboles o en el uso
de recursos extraordinarios que contradice esta idea es porque así lo amerita
el tema tratado.
o
Función didáctica de la poesía. Para los
antiguos, la poesía era la maestra de los pueblos. El poeta enseñaba
deleitando. También los neoclásicos asumen la poesía como un medio para
difundir sus mensajes doctrinarios.
o
La Impersonalidad. Los poetas
neoclásicos evitaron que el mundo privado de sus sentimientos se proyectase
directamente en la obra.
o
La Universalidad. El neoclasicismo no
fue partidario de los temas locales. Su orientación estética reposa sobre
cierta idea de lo universal. Lo mutable y transitorio no es importante. Hay que
buscar lo permanente, captarlo y expresarlo y así crear una obra de interés que
se proyecte sobre más lectores y al mismo tiempo que llegue a ser permanente en
el tiempo.
EL ROMANTICISMO
El Romanticismo fue
un movimiento cultural surgido en Alemania a fines del siglo XVIII; aunque los
primeros indicios de la sensibilidad romántica habían aparecido ya a mediados del
siglo XVIII en Inglaterra. Su aparición surge como una reacción a la frialdad del Neoclasicismo; por eso, propone que los
sentimientos estén por encima de la razón. Se caracterizó por defender la
libertad de inspiración y por la exaltación de los sentimientos. La literatura
se vuelve más subjetiva. El Romanticismo se puede definir
como un movimiento que da un grito de libertad; posee un espíritu rebelde que
va a luchar contra las diversas corrientes racionalistas. En España,
los representantes son: Gustavo Adolfo Bécquer con sus "Rimas" y José
Zorrilla con su obra Don Juan Tenorio. En Alemania, J.W. Goethe y su texto Fausto.
Concepto
e influencias históricas
La palabra “romántico” se deriva del
inglés “romantic”, lo que traduce como Novelesco. Dicha palabra fue usada por
primera vez en Inglaterra durante el siglo XVII. En este movimiento se puede
encontrar una admiración hacia los fenómenos más fuertes de la naturaleza como
cataratas, tempestades, el mar; una fascinación por lo esotérico, así como la
creencia en fantasmas y vampiros. Dentro de dicha corriente también se da un
interés por la literatura y la arquitectura medieval, esto hace que su
imitación se prolongue hasta finales del siglo XIX. El movimiento romántico
abarca casi todo el siglo XIX; pero su mayor apogeo se sitúa entre 1825 y 1875.
El movimiento en general se caracteriza por una nueva adopción y
reinterpretación de lo clásico y gótico, más que por un estilo propio.
El artista romántico puede ser
considerado individualista, apasionado y creador espontáneo por naturaleza; de
la manera más esencial e íntima, toda norma le resulta profundamente
desagradable. Se dice que el romanticismo es en realidad una manera de sentir
mucho más que una simple elección de un tema; por ello, este sentimiento se
percibe subjetivamente. El romanticismo deja de un lado la inspiración en la
Grecia y la Roma clásica, así como también huye del realismo trivial y de la
pura belleza exterior para buscar el movimiento interior. Esta expresión
interna generalmente se manifiesta en lo sentimental, así como muchas veces en
lo fúnebre y en lo negativo. El artista trata de captar el paisaje propio por
lo que se identifica con él exaltándolo y mostrando asimismo una tendencia
hacia lo arcaico, lo que le da cierta melancolía.
Este movimiento históricamente es más
propio de los pueblos germánicos, por lo que en los demás países sólo adquiere
tonalidades propias de cada espíritu nacional. En general, reviven aspectos de
la Edad Media, que fueron censurados por los neoclásicos. Así mismo los ideales
cristianos motivan a los escritores, y los paisajes melancólicos, ruinas, y
tierras exóticas, son descubiertos por el artista romántico. En la mujer
descubren no sólo el cuerpo bello, sino también el espíritu hermoso, por eso
los artistas románticos la tratan con toda consideración.
Características más importantes del
romanticismo
§ Es el
movimiento que se opone a serenidad clásica.
§ Es la
expresión viva, que se opone frente a la frialdad del Neoclasicismo.
§ Es la
exaltación de la libertad, frente a las reglas de la academia.
§ Es la
variedad, contra la unidad en la composición.
§ La
imaginación y el sentimiento, frente a la razón.
REALISMO
Este movimiento surgió en
contraposición a los excesos del Romanticismo; la literatura se vuelve objetiva
y el don de la observación es el elemento clave para hacer una descripción casi
fotográfica de la realidad. Se dio en el siglo XIX y entre sus representantes,
está el español Benito Pérez Galdós y su novela Marianela, el francés Gustave Flaubert con Madame Bovary. En Rusia, es conocido Fedor Dostoievski y su novela Crimen y Castigo.
NATURALISMO
El Naturalismo fue
una corriente literaria nacida en Francia, en la segundad mitad del siglo XIX;
se conoce, no tanto como oposición al Realismo, sino como evolución de este. El
Realismo partía de la observación de la realidad, el Naturalismo va más allá y
recoge, de la realidad cotidiana y social, las miserias humanas, y los
instintos más primarios y brutales.
SIMBOLISMO
El Simbolismo
surgió en Francia a finales del siglo XIX y consistió en una reacción contra el
Realismo y Naturalismo; esta corriente recogió parte del espíritu romántico y
trajo una experiencia de lo absoluto y un modo intuitivo de conocimiento.
MODERNISMO
Tanto el Modernismo como
la conocida con el nombre de Generación del 98, son dos tendencias que surgen
en la literatura hispánica a finales del siglo XIX y se desarrollaron en los
primeros años del siglo XX; ambas son expresiones de la crisis espiritual que
vive el mundo. En la
literatura de lengua española, el término modernismo denomina a un movimiento
literario que se desarrolló entre los años 1880-1910, fundamentalmente en el
ámbito de la poesía y se caracterizó por una ambigua rebeldía creativa, un
refinamiento narcisista y aristocrático, el culturalismo cosmopolita y una
profunda renovación estética del lenguaje y la métrica. También se conoce por
modernismo a la forma hispánica de la crisis universal de las letras y del
espíritu y que se manifiesta en el arte, la ciencia, la religión y la política.
En ciertos aspectos su eco se percibe en movimientos y en corrientes
posteriores. En las raíces del Modernismo hay un profundo desacuerdo con la
civilización burguesa.
Características del modernismo
El
modernismo hispánico es una síntesis del Parnasianismo y del Simbolismo: de los
primeros toma la concepción de la poesía como bloque marmóreo, con el anhelo de
perfección formal, los temas exóticos, y los valores sensoriales; de los
segundos la concepción de que el arte debe sugerir, y la búsqueda de efectos
rítmicos dentro de una variada musicalidad. Las principales características del
modernismo son:
§ El rechazo de la realidad cotidiana,
ante la cual el escritor puede huir en el tiempo (evocando épocas pasadas y
mejores) o en el espacio (muchos de los poemas se desarrollan en lugares
exóticos y lejanos).
§ Una actitud aristocratizante y
cierto preciosismo en el estilo, así como la búsqueda de la perfección formal
(de inspiración parnasiana) que se aprecia no sin cierto individualismo.
§ La búsqueda de la belleza se
consigue a través de imágenes muy plásticas y acercamiento a las artes, de una
adjetivación con predominio del color y con imágenes relacionadas a todos los
sentidos, así como con la musicalidad que produce el abuso de la aliteración,
los ritmos marcados y la utilización de la sinestesia (influencias del
simbolismo).
§ Tanto la fidelidad a las grandes
estrofas clásicas como las variaciones sobre los moldes métricos, utilizando
versos medievales como el alejandrino, el dodecasílabo y el eneasílabo; con
aportes de nuevas variantes al soneto.
§ El uso de la mitología y el
sensualismo.
§ Una renovación léxica con el uso de
helenismos, cultismos y galicismos, que no buscaba tanto la precisión como el
prestigio o la rareza del vocablo.
§ El deseo innovador que aspiraba a la
perfección que apreciaban en la literatura europea.
§ La adaptación de la métrica
castellana a la latina.
§ El culto a la perfección formal, con
poesía serena y equilibrada.
Temas del modernismo
La
temática modernista revela, por una parte, un anhelo de recreación de armonía
frente a un mundo inarmónico, y así un ansia de plenitud y perfección; y, por
otra parte, una búsqueda de raíces en la crisis que produjo un sentimiento de
desarraigo en el escritor, quien se presenta como guía capaz de mostrarle al
hombre común los valores verdaderos. Los temas tratados son muy variados, pero
estos son algunos de los más recurrentes:
•
La
desazón típica del romanticismo: el hastío de la vida y una profunda tristeza,
junto a la melancolía y la angustia.
•
Búsqueda
de la soledad y rechazo de una sociedad.
•
El
escapismo, evasión de la realidad del tiempo y del espacio.
•
El
amor y el erotismo, con cierta idealización del amor y de la mujer. El tema del
amor imposible se presenta con diferencias respecto al ideal romántico. Hay un
contraste entre el profundo y delicado amor y un intenso erotismo.
•
El
cosmopolitismo muestra el anhelo de distinto y aristocrático. Los modernistas
demostraban mucha devoción por París.
•
Los
temas americanos, en especial los temas indígenas, muchas veces con una defensa
del indígena.
•
Lo
hispano como antecedente histórico valioso que otorga una armonía frente al
mundo inarmónico.
Raíces del modernismo
Tradicionalmente
se ha asociado su comienzo a la publicación, en 1888, de Azul..., de RubénDarío, a causa de la innegable repercusión del libro en la literatura de
Hispanoamérica. El término modernismo designaba cierta corriente heterodoxa de
renovación religiosa, y se aplicó en el campo de las artes a tendencias
surgidas en los últimos veinte años del siglo XIX. Sus rasgos más comunes eran
un marcado anticonformismo y un esfuerzo de renovación. En su origen el apodo
de “modernistas”` era utilizado con un matiz despectivo; hacia 1890, Rubén
Darío y otros asumen tal designación con insolente orgullo; a partir de
entonces el término modernismo fue perdiendo valor peyorativo. En ciertos
aspectos su eco se percibe en movimientos y en corrientes posteriores.
Principales autores modernistas
El
Modernismo cuenta con un elevado número de escritores en América. Algunos han
tenido verdadera repercusión internacional y otros han quedado reducidos al
ámbito nacional. Un aspecto común fueron los viajes que hicieron, bien por
trabajo (muchos fueron diplomáticos), bien por ampliar sus conocimientos y
conocer a otros escritores. Rubén Darío es, sin lugar a dudas, el más
influyente, pero también hay otros que entablaron relaciones con escritores
españoles. Algunos autores que participaron de una estética semejante y
publicaron en la primera mitad de la década de 1880, como José Martí, Julián
del Casal, Manuel Gutiérrez Nájera, Salvador Díaz Mirón, Enrique Gómez
Carrillo, Manuel González Prada, José Asunción Silva y Salvador Rueda fueron
considerados precursores del modernismo. La crítica actual los considera
autores plenamente modernistas.
EL VANGUARDISMO
Esta corriente literaria se
orienta hacia un arte nuevo y libre; reúne a las tendencias que surgieron al
finalizar la Primera Guerra Mundial, denominadas "ismos". Rechaza el
arte desde Homero hasta el Modernismo de Rubén Darío. La primera mitad
del siglo XX se caracterizó por los enfrentamientos bélicos entre potencias
europeas, lo cual produjo hechos como la Primera Guerra Mundial, la Revolución
soviética y la Segunda Guerra Mundial. El movimiento vanguardista toma su
nombre de un término militar que significa los batallones que van de avanzada
en la batalla; esta fue la significación que se le dio en el ámbito literario:
un desafío a lo establecido en las formas de expresión, ya que busca distintas
formas experimentales y se opone a las tradicionales. En la raíz de estos
movimientos está la inseguridad humana por la crisis de una sociedad dividida
entre tradicionalista y revolucionaria. El período de entreguerras es de una
actividad importante en lo político, en lo social y en lo artístico. Los
“ismos” como se llamó a las distintas corrientes artísticas de la época, fueron
en su mayoría de poca duración y se sucedieron uno tras otro en los años
comprendidos entre 1914 y 1930.
Entre los movimientos de vanguardia
destacados en América están: el Creacionismo iniciado por Vicente Huidobro, el
Ultraísmo representado por Jorge Luis Borges y Surrealismo que aparece en
algunas composiciones de César Vallejo y Pablo Neruda. Estos movimientos no se
limitaron a proponer un cambio formal en el lenguaje de la poesía; por el
contrario, desde los años que le siguen a 1920, la narrativa comienza a ser
atendida con toda inquietud por algunos de los mismos escritores afiliados a
los grupos de vanguardia. La década de 1920 a 1930 atestigua estos primeros
intentos de escribir cuentos y novelas cuyo lenguaje, técnicas y temas se
salían completamente del tema regionalista. Así ocurre, por ejemplo, con el
narrador uruguayo Filiberto Hernández (1902), quien desde 1925 inicia el ciclo
de unos textos inmensamente extraídos en su lenguaje y completamente despojados
de color local en sus temas.
Características
del vanguardismo
·
El escritor vanguardista es un
inconforme, ya que el pasado no sirve, hay que buscar un arte que responda a
esta novedad interna que vive el hombre, apoyándose en la novedad original que
uno lleva por dentro.
·
Es necesario abandonar los antiguos
temas, ya que están gastados, carecen de sustancia, y no responden al hombre
nuevo.
·
En algunos movimientos vanguardistas hay
una marcada tendencia a hacer plástica en la coloración de las palabras, para
formar la obra literaria.
·
En la poesía vanguardista se juega
constantemente con el símbolo. Ciertos animales como el búho y el buitre son
representaciones simbólicas que recorre al poeta.
·
Los poetas vanguardistas reaccionan
contra las reglas tradicionales de la versificación, pero sus necesidades
expresivas no se adaptan "a formas fijas" y necesitan una mayor
libertad ya que lo fundamental no va a ser lograr sonidos agradables, sino
"la expresión adecuada de su mundo interior".
·
Reacción contra el modernismo,
específicamente contra los imitadores de los maestros de esta corriente.
·
Flujo y reflujo de las tendencias
europeas. Los grandes cuadros de este período se nutren en la savia de su tierra
y de su circunstancia humana
·
Conciencia social: casi todos los más
significativos escritores de este tiempo acusan en su obra una conciencia
social que los lleva a tomar posiciones frente al hombre y su destino
·
Hay nuevos temas, nuevo lenguaje, revolución
formal, desaparición de la anécdota.
·
Se proponen temas como el
anti-patriotismo, la deserción, la existencia de los hombres reales de carne y
hueso.
·
El punto de vista del narrador es
múltiple, o lo que algunos llaman simultaneidad de puntos de vista.
·
Incorpora el ambiente a la acción y los
hace indivisibles, por lo que va a existir "un vínculo estrecho entre el
ambiente y los gustos de los personajes.
·
La diferencia entre la narrativa
vanguardista y la narrativa regional consiste en un cambio de ubicación de los
mundos imaginarios creados por los escritores: en esta última, ese mundo
imaginario está íntimamente relacionado con el espacio físico, apegado a la
naturaleza y al paisaje (novela de la tierra o telúrica); en la narrativa
vanguardista, en cambio, ese mundo ficticio, se traslada a las ciudades y da
lugar a lo que se denomina, en contraposición con aquella, la narrativa urbana.
·
En la novela vanguardista el espacio
“urbano” o “cosmopolita” crece en la medida en que el desplazamiento temático
se produce de la naturaleza al hombre radicado en concentraciones urbanas (que
ha tomado conciencia de su situación en el mundo contemporáneo). Las dos
Guerras Mundiales, la Guerra Civil Española, el surgimiento de doctrinas
totalitarias y la depresión económica del año 30, entre otros sucesos, producen
una crisis moral y cultural que modifica el concepto de la existencia humana en
un clima de angustia y zozobra de alcances universales.
·
El hombre contemporáneo, como los
personajes de la nueva novela, se orienta entonces hacia la indagación de sí
mismo asistido por los descubrimientos de la psicología moderna que penetra e
campos del subconsciente –explorado por Sigmund Freud- y por corrientes
filosóficas que, como el existencialismo, analizan la situación del ser humano
en un mundo absurdo y angustiante. La mayor parte de las obras son de carácter
psicológico, flujos de la conciencia y la subconsciencia, donde se combina la
realidad con lo mítico y lo absurdo. Se profundiza en el mundo interior de los
personajes, pues trata de presentarlos a través de sus más escondidos estados
del alma.
·
En este tipo de literatura no interesa
el tiempo cronológico, sino el tiempo anímico
·
No se toma en cuenta el aspecto físico,
pues, se limita a sugerir para que el lector complete, el autor exige la
presencia de un lector atento que vaya desentrañando los hechos oscuros que se
presentan y armando inteligentemente las piezas de ese rompecabezas de la
novela de nuestro tiempo.
LOS DIFERENTES ISMOS
Dentro de la corriente vanguardista se
pueden tomar aquellos movimientos que surgen contra corrientes envejecidas y
proponen innovaciones radicales de contenido, lenguaje y actitud de vida.
EXPRESIONISMO. Encabezado
por Georg Tialk en 1920. Este movimiento nació en Alemania y va contra el
naturalismo; entre sus principios se pueden señalar: reconstruir realidad, relacionar
la expresión literaria con artes plásticas y música, expresar la angustia del
mundo y de la vida a través de novelas y dramas donde se habla de las
limitantes sociales impuesta a la libertad del hombre como la autoridad.
CUBISMO. Nació
en Francia de la mano de Guilaume de Apollinari y sus principales rasgos
consisten en: asociación de elementos imposibles de concretar, determinados por
la lógica espacial; desdoblamiento del autor, quien se interpela a sí mismo
como si fuera un lector; disposición gráfica de las palabras con el fin de que
asuman calidad artística; sustitución de lo sentimental por el humor y la
alegría; retrato de la realidad a través de varios enfoques.
FUTURISMO. Surgió
en Milán, Italia y su creador fue Filipo Tommaso Marinetti. Este movimiento
rompió con la sintaxis, con el ritmo y con los signos convencionales de la
puntuación. Considera como elementos principales de la poesía, el valor, la
audacia y la revolución, ya que los futuristas pregonaban el movimiento
agresivo, el insomnio febril, el paso gimnástico, el salto peligroso y la
bofetada. Los postulados del futurismo son: la exaltación de lo sensual, lo
nacional y guerrero; adoración a la máquina como prolongación del hombre
inteligente; retrato de la realidad en movimiento; objetivo de lo literario,
supresión del yo poético; destrucción de la sintaxis y la puntuación; disposición
especial del lo escrito, con el fin de darle expresión plástica
DADAISMO. Apareció
en Zurich, Suiza, en el 1916 y su fundador fue Tristán Tzara quiso
oponerse al pasado violento de la guerra
mundial. El poema dadaísta, suele ser una sucesión de palabras y a veces de
sonidos, lo que hace difícil encontrar el hilo conductor de la lógica, se
distingue por la inclinación hacia lo dudoso, el terrorismo, la muerte y el
nihilismo; es fantasioso y recrea las expresiones del sueño; busca renovar la
expresión mediante el empleo de materiales inusuales o manejando
simultáneamente planos de pensamientos antes no mezclables; su tónica general
es de rebeldía o de destrucción.
ULTRAISMO. Surgió
en España (1919-1922), como una reacción contra el modernismo; como el dadaísmo
francés, pretendía la renovación de la poesía y se nutrió de todos los
innovadores europeos; así, dio origen a la versión americana conocida como Creacionismo.
El Ultraísmo fue uno de los movimientos que más se proyectó en Hispanoamérica y
contribuyó con la apertura de nuevos caminos literarios capaces de acentuar el
uso del verso libre, la prescripción de la anécdota y el desarrollo de un
lenguaje metafórico. El Ultraísmo se afianzó en una nueva concepción técnica
del lenguaje poético; por tal razón, la metáfora se convirtió en el principal
centro expresivo. Su representante fue el poeta Guillaume Apollinari.
CREACIONISMO. Este
“ismo” es la versión del Ultraísmo en Hispanoamérica, surgió en 1917,
patrocinado por el poeta chileno Vicente Huidobro, quien concibe al poeta como
un pequeño Dios con poderes para crear con la palabra. Según Huidobro, el poeta
no debe ser un hombre.
SURREALISMO. Movimiento
aparecido en Francia y cuyo representante fue André Bretón. Este escritor
siguió las ideas de Freud y se interesó
por descubrir los mecanismos del inconsciente, en un esfuerzo para sobrepasar
lo real por medio de lo imaginario y lo irracional. La literatura surrealista
es el resultado de una visión más integral de la naturaleza del creador y de
una liberación total del hombre, desde 1920 hasta 1939. Entre sus
características, se cuentan la siguientes: pretender la creación de un hombre
nuevo, resultado del cambio social marxista y de la salud mental psicoanalítica;
recurrir a la crueldad y al humor negro, con el fin de destruir todo matiz
sentimental. A pesar de ser constructivo, no le interesa ni los aspectos de la
conducta moral humana ni sus manifestaciones.
IMPRESIONISMO
O NOVELA PSICOLÓGICA. Reacciona contra los excesos del Realismo
y fijan su interés en el proceso mental desarrollado en el interior de un
personaje, cuando se enfrenta a alguna situación externa o a sí mismo. Entre
sus características se encuentran: trasladar hasta la obra, la verdadera
existencia radicada en los procesos mentales y no en los aconteceres de la vida
externa de los personajes; destacar la forma cómo el proceso mental de un
personaje, es intuitivo y desvinculado de la realidad; además, manejan
personajes cuya conducta está denominada por las asociaciones psicológicas.
SUPREREALISMO. Su
representante es Miguel Ángel Asturias, es un movimiento que se apoyó
originalmente en los trabajos de Freud. Es un movimiento que consiste en la
captación de la coincidencia-realidad surgida en un personaje, cuando este vive
un hecho que le provoca recuerdos recónditos coexistentes en el propio suceso.
EXISTENCIALISMO. Es
una corriente filosófica según la cual lo principal de la realidad es la
existencia humana.
EXPERIMENTALISMO. Fue
un movimiento que se apoyó en el método científico para explicar, a través de
sus pasos aplicados a la literatura, el comportamiento de los personajes dentro
de un relato.
FUENTE
El Romanticismo (s.f.). RENA. Red Escolar Nacional. (Documento en Línea). Disponible: http://www.rena.edu.ve/cuartaEtapa/historiaArte/Tema14.html
(Consulta: 18/02/12).
Peláez, V. (2011. Diciembre, 13). Corrientes
literarias. Voces libres (Blog en
línea). Disponible: http://voceslibres.lacoctelera.net/post/2011/12/13/corrientes-literarias.
(Consulta: 23/02/12).
Vásquez, M. (2011. Mayo, 3). El Vanguardismo. Las
letras que queremos. (Blog en línea). Disponible: http://mireyavasquez.blogspot.com/2011/05/el-vanguardismo.html
(Consulta: 18/02/12).